Caos. Si alguna palabra puede describir la situación de Venezuela en los últimos días sería precisamente esa; que significa «desorden o confusión absolutos». Dentro de ese caos se revela la tragedia, que enluta a las familias de todos los caídos durante las manifestaciones; y todo un país que, incluso en sus horas más oscuras, se niega a perder la esperanza.
Como parte de este mismo caos, la «escasez» de medios de comunicación creíbles, oportunos e imparciales ha derivado en la utilización de redes sociales para compartir información. Entre todas destaca el WhatsApp, con sus conocidas «cadenas» y los famosos «grupos» que, dependiendo del sentido común de sus integrantes, pueden ser una maravilla o una verdadera locura.
Es cierto que la gravedad de la situación hace que tengamos cada vez más hechos que compartir, pero una de las consecuencias del caos es la infopolución de mensajes no verificados, desactualizados o inapropiados que terminan generando una desinformación que solo sirve para crear confusión, zozobra y hacer mella en nuestra salud mental.
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Desde hace tiempo pertenezco a varios grupos y, en al menos seis de ellos, diariamente se habla de la represión, la muerte, el hambre y el sufrimiento de los venezolanos; un tema doloroso que debería ser tratado siempre con respeto y seriedad. En el último mes llegué a contar hasta cien mensajes por hora y muchas veces es tan abrumador que resulta imposible leerlos todos.
Sin embargo, hay uno de ellos que funciona muy bien y en el que (sorprendentemente) no se han contabilizado «bajas» ni peleas estériles desde su creación. Analizando su funcionamiento, encontré algunas «buenas prácticas» que me parecen útiles para seguir un grupo de WhatsApp sin «morir en el intento» y que comparto en InmigrantesEnMadrid.com ante la necesidad (cada vez mayor) de optimizar el uso de este tipo de herramientas para estar informados:
Verificar la fuente
Se repite hasta el cansancio, pero mucha gente sigue compartiendo «noticias» falsas que solo aparecen publicadas en páginas web «raras». Llegué a ver, incluso, un post de El Chigüire Bipolar titulado «Seniat multará el sentido común con 100 unidades tributarias»; acompañado por comentarios como «¡Dios mío que locura!, ¿dónde iremos a parar? ¡Solo a este régimen podría ocurrírsele algo como esto!».
Puede que no todo el mundo sepa qué es El Chigüire Bipolar pero ¡por favor!, la página se llama «Elchiguirebipolar.net». Incluso sin estar enterado de su ironía y humor negro, nadie debería asumir que algo publicado por una web con ese nombre es realmente en serio. Ni hablar de otras, menos simpáticas, con nombres bastante más absurdos.
Antes de compartir una información en cualquier red social es importante leer la noticia completa y no solo el titular, verificar el rigor periodístico en la atribución de las fuentes (identificación precisa de la persona que declara o revela la información al periodista o al medio), contrastar con otras páginas web, y verificar el dominio y la URL.
No dejar la responsabilidad a otros
Hacerse eco de un post amarillista, una imagen tendenciosa o una información delicada que no está respaldada por nadie, es contribuir con la desinformación y el caos. Agregar un comentario al estilo de: «No me consta, pero…», «me lo pasaron así de otro chat…», «¿alguien puede verificar esta información?»; no exime de responsabilidad a quien lo comparte.
Probablemente la mayoría de los integrantes del grupo tengan las mismas posibilidades/herramientas para «verificar» así que ¿por qué no hacerlo tú mismo antes de generar alarma sin necesidad?
Mejor un enlace
Los screenshot (capturas de pantalla o pantallazos) de los tweets de voceros de la oposición son una imagen .jpg que ocupa espacio en el teléfono. Además, son susceptibles de edición gráfica. Si quieres informar al grupo sobre los trinos o post de Facebook de alguien, es mucho mejor indicar brevemente de qué se trata y facilitar un enlace al sitio web donde podrá leerse con mucha más seguridad y sin saturar el teléfono.
Si se trata de fotografías tomadas con tu teléfono móvil, selecciona las mejores y no envíes 25 imágenes por minuto. Muchas personas tienen su WhatsApp configurado para que se descarguen automáticamente y estarías haciéndolos desperdiciar batería y megas en un montón de fotos, cuando solo bastarían tres o cuatro.
Otro dato: Las imágenes de buenos días y feliz cumpleaños son muy bonitas pero, al igual que cualquier fotografía, ocupan espacio valioso en el teléfono. Escribirlo directamente, incluso con emojis (muñequitos), es igual de sincero y cariñoso.
Escribe el mensaje completo
Si tienes información importante compártela tratando de ponerla toda (o toda la que puedas) en un solo mensaje. Los envíos fraccionados pueden generar confusión, especialmente si se mezclan con otros mensajes de otros integrantes del grupo; sin contar con las malas jugadas que puede hacer el internet cuando el segundo o tercer mensaje se tardan más en llegar que el primero; generando una expectación innecesaria.
¿Y ese video de qué es?
Los videos son los mayores consumidores de datos en un chat de WhatsApp. Siempre es bueno acompañarlos con un breve mensaje que indique de qué tratan, pues muchas veces (ante la inquietud) se descargan cosas que podrían haber esperado llegar a casa y utilizar el WiFi.
Llamados a la acción
Si un líder político o estudiantil, un militar, una figura pública o un gremio quiere organizar acciones de protesta, una agenda de actividades o fijar posición sobre hechos puntuales; lo hará dando la cara y garantizando (por todos los medios a su alcance) que no quede duda sobre la veracidad de ese contenido. Evite difundir mensajes sensibles que carecen de firma, responsable, fuente, aval o que no están reflejados en los medios digitales o redes sociales verificadas de los involucrados.
Recomendaciones finales
- Las imágenes fuertes deberían compartirse por privado y solo con los interesados. Hay personas que pueden ver herida su sensibilidad ante cierto tipo de contenidos gráficos.
- La misma declaración o la misma foto pueden significar cosas diametralmente opuestas, dependiendo de la fecha y/o el lugar al que correspondan. Si estás en el ordenador (computadora o laptop) haz clic con el botón secundario del mouse sobre la imagen que quieres publicar, para que Google la busque y puedas saber si es una «noticia falsa» o desactualizada, antes de compartirla.
- A menos que se trate de algo realmente urgente o importante; respeta las horas de sueño de los integrantes del grupo. Obviamente esto resulta difícil cuando se trata de personas que viven en distintos lugares del mundo.
- Si lo que vas a publicar es algo viral que te ha llegado por otra red social, lee lo que se ha comentado en el grupo antes de compartir esa imagen, enlace o video. Existe la posibilidad de que alguien se te haya adelantado.
- WhatsApp ha incorporado recientemente una función de responder y otra de mencionar, que son de gran utilidad para evitar confusiones y garantizar la secuencia lógica del debate, especialmente en grupos con mucha actividad. Úsalas.
- Finalmente: Un grupo de WhatsApp no es el mejor lugar para una extensa conversación personal entre dos de sus integrantes. Escríbanse por privado o, mejor, llámense.
Por: María José Flores
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