“Las TIC’s en la educación: Creatividad y cambio”; por @ElizabethReyesL

Cada día la educación virtual toma más fuerza y por lo tanto debemos reflexionar sobre el papel y el uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación en la formación, por lo que debemos analizar las perspectivas en el uso de las TCS´s tanto en los docentes como en los alumnos y sus implicaciones en los procesos enseñanza-aprendizaje.

Pero ¿cuáles son las características y competencias que debe poseer todo docente en la actualidad y el uso que le debe dar a las TIC´s cuando imparte clases?

En reto de todo docente es propiciar en sus estudiantes la cultura hacia el conveniente uso de las Tecnologías de la Información y la Comunicación; así como buscar el dominio y manejo de las herramientas que estas brindan. No se trata de copiar el modelo de clase magistral utilizando la pizarra y trasladarlo a la plataforma educativa o aula virtual. Se trata de utilizar las diferentes opciones que brindan las TiC´s para propiciar el aprendizaje colaborativo.

Ahora bien, ¿cómo ser un docente creativo? El profesor de la era digital debe ser creativo, crítico y dispuesto al cambio. La creatividad es un factor fundamental para profesores y estudiantes por igual en la educación virtual. El docente que no es creativo solo utiliza pocos elementos; mientras que el creativo construye una red alrededor de su labor en el aula, mediante la cual las opciones crecen.

En ese sentido aparece el concepto de PLE (Personal Learning Environment) o Entorno Personal de Aprendizaje, el cual según Stephen Downes “está diseñado para estimular el aprendizaje a través de la inmersión en una comunidad y no a través de una presentación de hechos”.

“Concebimos un PLE como el conjunto de herramientas, fuentes de información, conexiones y actividades que cada persona utiliza de forma asidua para aprender (Adell J. & Castañeda, L, 2010 p.7).

Por lo tanto un Entorno Personal de Aprendizaje es el entorno que como docentes creamos utilizando diversas herramientas, recursos, fuentes de información y actividades, las cuales proponemos a nuestros estudiantes para cumplir un objetivo en el aula; inmediatamente los estudiantes crean sus propios entornos personales, y así se alimenta el proceso.

Ser un docente crítico, es analizar y reflexionar sobre el entorno y su práctica pedagógica, fomentando en nuestros estudiantes la toma de postura y la formación integral, más aún en la era de las tecnologías, en la cual los problemas éticos están a la orden del día.

En ese sentido la filosofa y profesora americana Martha Nussbaum afirma que existen tres capacidades necesarias para lograr este objetivo: Tener pensamiento crítico para poder fomentar en los estudiantes la reflexión; habilidad cosmopolita para entender las diferencias entre los grupos y la imaginación narrativa para ponernos en los zapatos de diferentes tipos de personas. Así es que desde el entorno tecnológico podemos desarrollar una ética en donde el otro, desde su diferencia sea considerado un interlocutor válido.

En la educación virtual también debemos estar dispuestos al cambio, puesto que uno de los mayores problemas en la era de las tecnologías, es que muchos profesores se resisten al cambio. A pesar de que las computadoras o dispositivos tecnológicos llegan al aula, no abandonan sus viejas costumbres.

Debemos actualizar nuestras prácticas constantemente, basándonos en la reflexión que hagamos de las mismas. Debemos cambiar por compromiso con nuestros estudiantes y no por imposición, a fin de que obtengan un aprendizaje más significativo, y esto solo es posible si nosotros nos transformamos primero.

Por: Elizabeth Reyes León / @ElizabethReyesL en Twitter

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