Cinco claves para cuidar la piel después del sol de verano

El verano es la época del año cuando nuestra piel recibe mayor cantidad de rayos ultravioleta, independientemente del lugar donde nos encontremos.

Lucir una piel bronceada es muy atractivo y también saludable, debido a que el sol produce beneficios al aportar vitamina D, pero exponernos de manera excesiva a los rayos solares, puede ser desastroso para la piel de todo nuestro cuerpo.

Por esta razón es importante conocer cuáles son los cuidados que debemos tener con nuestra piel después de haber sido expuesta al sol de verano.

Tras la temporada de calor nuestra piel se torna seca y llena de impurezas, por lo que pueden aparecer manchas especialmente en el rostro. Ahora bien, ¿qué debemos hacer para volver a tener una piel tersa y sana?

A continuación, en InmigrantesEnMadrid.com, te damos algunos consejos de los especialistas para cuidar nuestra piel después del intenso sol de verano.

Limpieza

Lo primero que debemos hacer es una limpieza profunda en nuestra piel, utilizando los productos adecuados para retirar las impurezas. Es el momento ideal para hacerse una exfoliación y así renovar la piel de todo el cuerpo. Para una limpieza profunda también recomiendan peeling o laser.

Hidratación

Después de limpiar es fundamental comenzar a hidratar nuestra piel de manera abundante. También mantener la utilización de los filtros solares, pues si bien es cierto que durante el verano hace más calor, la radiación solar que daña la piel está presente durante todo el año.

Es recomendable llevar siempre una crema hidratante para colocarla en el rostro y especialmente en las manos, la cuales tienden a ser más susceptibles a la resequedad.

Limitar la exposición al sol

No podemos olvidar que mientras más tiempo estemos expuestos a los rayos solares, más probabilidades tenemos de envejecer de manera prematura. Los rayos solares son la primera causa de envejecimiento, pues una persona que se expone diariamente al sol, puede tener diez años más en apariencia que si no se expusiera.

Alimentación sana

Para regenerar la piel de los posibles daños causados en el verano, además de hidratarla por fuera con cremas y los productos naturales adecuados, debemos hidratarla desde adentro consumiendo por lo menos dos litros de agua al día.

Una buena alimentación también es necesaria para mantener nuestra piel sana, por lo que los especialistas recomiendan el consumo diario de vegetales, especialmente los verdes y los de colores llamativos como la zanahoria, berenjenas y otros que aportan vitaminas que benefician a nuestra piel.

Mascarillas naturales

Existen cientos de recetas naturales que ayudan al cuidado de la piel después del verano, ya sea para exfoliar o para hidratar. Por ejemplo un excelente exfoliante natural es el que se logra mezclando miel, azúcar y jugo de limón o el que se prepara con bicarbonato de sodio y miel.

También son recomendables las mascarillas para piel bronceada como la de cúrcuma, miel y leche que ayuda a recuperar el tono natural de nuestra piel.

La exfoliación se recomienda una vez por semana y la mascarilla hidratante dos veces por semana.

En caso de que nos hayamos excedido en la exposición al sol y tengamos partes muy enrojecidas o con ampollas solares, además de acudir al médico debemos tratar estas zonas con vendas secas y aplicar infusiones frías de manzanilla o jugo de pepino que nos ayudarán a reducir las molestias.

¿Y tú cómo te cuidas la piel después del verano? Si tienes algunos consejos compártelos en los comentarios que seguro serán de gran ayuda para muchas personas.

Si te gustó este post compártelo en tus redes sociales para que llegue a todos tus amigos y conocidos.